La tendinitis es la inflamación (con irritación e hinchazón) del tendón, que es la estructura que une el músculo con el hueso.
La tendinitis es una enfermedad crónica y recidivante. Esto provoca la degeneración del tendón, por ello actualmente el término tendinitis se está reemplazando por tendinopatías.
Este tipo de afecciones se han ido incrementando en los últimos tiempos debido al aumento de la práctica de actividades recreativas de carácter deportivo.
Causas de la tendinitis
Generalmente ocurre en adultos jóvenes por un esfuerzo repetitivo o sobrecarga de una zona del cuerpo. Esto provoca que algunos músculos trabajen más que otros, debilitando la zona de los tendones. Por este motivo, las tendinitis se consideran como enfermedades por sobrecarga, y son especialmente frecuentes dentro de la patología laboral y deportiva.
En adultos mayores la tendinitis ocurre debido al envejecimiento de los tejidos, y en estos casos puede haber degeneración del tendón.
Puede verse afectado cualquier tendón, aunque la tendinitis se observa con mayor frecuencia en la parte superior del cuerpo:
- Tendinitis del hombro.
- Tendinitis del codo.
- Tendinitis de la mano y muñeca.
De la cintura hacia abajo, es habitual la tendinitis del talón o tendinitis aquílea.
Síntomas
- Dolor y sensibilidad a lo largo de un tendón, generalmente cerca a una articulación
- Dolor en la noche
- Dolor que empeora con el movimiento o la actividad
Tratamiento
El objetivo del tratamiento es aliviar el dolor y reducir la inflamación.
El reposo o la inmovilización de los tendones afectados ayuda a la recuperación y se puede lograr empleando una férula o un dispositivo ortopédico removible. La aplicación de frío en el área afectada ayudar a disminuir la inflamación
Los antinflamatorios no esteroides (AINES), como el ácido acetilsalicílico (aspirin) y el ibuprofeno, también pueden reducir tanto el dolor como la inflamación. La fisioterapia es esencial para restaurar la capacidad del tendón para funcionar apropiadamente, mejorar la cicatrización y prevenir lesiones futuras.
En raras ocasiones, se necesita cirugía para retirar físicamente el tejido inflamatorio que se encuentra alrededor del tendón.